De acuerdo al vocero de la Secretaría de Protección y Vialidad (SPyV) municipal, Jorge Valdez Reycén, el doble homicidio se registró en la colonia Cumbres de Figueroa, en la parte alta de la ciudad.
Las primeras investigaciones indican que el taxista Guillermo Salazar Carpio, de aproximadamente 40 años de edad y quien perteneció a la Armada de México, asignado en la Octava Zona Naval Militar con sede en esta ciudad, discutió con sujetos desconocidos en un bar de la zona centro.
Posteriormente el taxista a bordo de su unidad azul con blanco, llegó huyendo de sus agresores a la vivienda del abogado Ramón Muñoz Pérez, de 36 años de edad, ubicada en la colonia Cumbres de Figueroa, quien le dio refugio para evitar algún atentado.
Sin embargo el grupo de sujetos desconocidos logró seguir al taxista y dar con su paradero, por lo que al arribar al domicilio del abogado litigante uno de ellos bajó de un auto, entró a la vivienda y accionó el "cuerno de chivo".
Tanto el taxista y el abogado murieron instantáneamente por los aproximadamente seis tiros de AK-47 que recibieron cada uno de ellos, mientras que los homicidas huyeron a bordo de un automóvil tipo Fiesta de color gris, vidrios polarizados y placas de circulación del Distrito Federal.
Pese a que diversas células del programa México Seguro rodearon la zona para cercar a los asesinos, los operativos no tuvieron éxito.
Valdez Reycén señaló que los familiares del abogado declararon a las autoridades ministeriales que el taxista llegó huyendo y que no debía nada como para privarlo de la vida.
Por los hechos, las autoridades de la Procuraduría de Justicia iniciaron la averiguación previa TAB/GAR/59520006 por el delito de homicidio en contra de quien resulte responsable.
Juan José Belmonte Torres
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