Puebla, Pue. “No vamos a permitir ningún acuerdo que se construya sobre el pantano, la inmundicia de un fraude electoral”, aseguró Andrés Manuel López Obrador.
El candidato presidencial por la Coalición Movimiento Progresista subrayó: “no nos hemos rendido ni nos vamos a rendir”, y les advirtió al Partido Revolucionario Institucional “que se toparon con un pueblo y dirigentes que no tienen precio. ¡México no se vende!”.
Al participar en esta ciudad en una de las asambleas informativas que este domingo se realizan en todo el país para continuar recabando pruebas sobre la presunta compra de votos, López Obrador anuncio que esta semana entregarán a los magistrados del tribunal electoral un documento que sintetiza todas la violaciones a la Constitución y a las leyes que se presentaron durante el proceso electoral, y que incluirán “pruebas plenas, contundentes, para que no quede ningún pretexto ni se pueda utilizar ninguna argucia legal que declare las elecciones como válidas”.
Indicó que el documento que se elabora para los magistrados se entregará a mediados de la semana que inicia para dejar en claro “que estas elecciones ni fueron libres ni auténticas”. Ante miles de ciudadanos que participaron en el zócalo de la capital poblana en la asamblea informativa, señaló se mantendrán la lucha por la defensa del voto después de que alrededor de 16 millones de mexicanos sufragaron por él el pasado 1o de julio “y los vamos a defender”.
Y En referencia a Enrique Peña Nieto y al PRI dijo "no se van a poder sentar en la silla presidencial porque no los quiere el pueblo de México”.
El abanderado de la izquierda explicó que siguen ”saliendo por todos lados evidencia que utilizaron empresas fantasma para financiar todo lo referente a la promoción (de Enrique Peña Nieto), para la compra del voto en favor del PRI y tenemos ya todas las pruebas y vamos a seguir presentando más evidencias al tribunal electoral porque estamos pidiendo la invalidez de la elección presidencial”.
López Obrador dijo que ni con la presión que el 1o de julio realizaron otros candidatos presidenciales para que se aceptara que Peña Nieto era el puntero en la jornada electoral, ni con la campañas de desprestigio pudieron hacerlos a un lado. Tengan confianza, les dijo a sus simpatizantes. “Ahora como no llamamos a ninguna movilización y decidimos actuar por la vía legal están preocupados, nerviosos porque estamos presentando pruebas. Ellos quisieran, anhelan que dijéramos que ya se acabó, para hacer y deshacer. Pero eso no, jamás a vamos a traicionar al pueblo”.
Y tampoco “le vamos a dar pretexto a los violento será que nos acusen de violentos porque este movimiento es, ha sido y seguirá siendo pacífico”.
Mientras López Obrador daba su discurso la gente empezó a hacerle llegar tarjetas Monex y sobre todo tarjetas telefónicas con imágenes de Peña Nieto y el logotipo del PRI que habrían sido entregadas durante el proceso electoral.
“Tenemos información de que se repartieron 5 millones de esas tarjetas”, dijo en referencia a las telefónicas e hizo la cuenta de si a cada uno de esos plásticos la cargaron con 100 pesos de tiempo aire, por lo menos los príistas se habrían gastado 500 millones de pesos, monto que por sí solo representaría el tope de campaña establecido en 336 millones de pesos.
López Obrador agradeció el apoyo que hasta el momento le han brindado y también el que le otorgado los dirigentes de los partidos que integran la coalición Movimiento Progresista Jesús del PRD; Alberto Anaya, del PT, y Luis Walton, de Movimiento Ciudadano, que lo acompañaron en el templete junto con Ricardo Monreal.
“Para mí es muy importante que los tres partidos del Movimiento Progresista estén respaldando, que no hay fisuras, divisiones, a diferencia de otros aquí hay unidad y vamos a seguir en unidad. Por eso mi agradecimiento a los dirigentes de los tres partidos porque no me han regateado apoyos, lo digo de manera abierta,
La Jornada en Internet: Descarta AMLO acuerdo en "inmundicia del fraude"
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