Los reos demandan más seguridad, que el Ejército asuma el control y el traslado de 33 internos.
Acapulco, Gro. Tres muertos, uno de ellos decapitado, y ocho heridos, es el saldo de un motín de 100 internos en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Acapulco.
De acuerdo a versiones, alrededor de las 13:00 horas fueron introducidas armas al penal aprovechando el día de visita, ocasionándose un enfrentamiento entre custodios e internos en el área de máxima seguridad, conocida como Ceresito, desde donde fue arrojada una cabeza humana y apareció un hombre muerto.
Al percatarse, guardias estatales de seguridad abrieron fuego desde las torres de vigilancia, hiriendo a nueve de los amotinados, uno de los cuales falleció cuando recibía atención médica.
Las detonaciones se escucharon en el área de juzgados y provocaron temor en litigantes y familiares de presos.
De manera simultánea, un vehículo Tsuru fue atravesado e incendiado por otro grupo de hombres en la Calle del Futbol de la colonia Libertadores, a unos 90 metros del acceso al Cereso.
Los 100 amotinados se resguardaron en el área de máxima seguridad (Ceresito) con sus familiares, desde donde exigieron entrevistarse con autoridades.
Alrededor de las 14:00 horas, al centro penitenciario arribaron elementos del Ejército Mexicano.
Posteriormente, entre las 14:30 y 16:00 horas ingresaron al penal alrededor de 300 elementos de seguridad de los tres niveles de gobierno en diversos vehículos, que mantuvieron la vigilancia en el exterior e interior del Cereso.
En total fueron 12 patrullas de la Policía Federal, un vehículo antidisturbios conocido como Rino, 10 camionetas también federales, cuatro ambulancias de la Cruz Roja, siete vehículos Hummer del Ejército Mexicano y cuatro camionetas de la Secretaría de Marina Armada de México, además de ocho camionetas de la Policía Estatal, todas con agentes a bordo.
Alrededor de las 14:45 horas, les fue permitida la salida del Cereso a unas 100 personas, entre trabajadores de juzgados y familiares de internos. A las 16:00 horas arribó en helicóptero el titular de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Civil estatal, Ramón Almonte Borja.
A las 17:00 horas, un grupo de 100 personas con cartulinas en mano arribó a la Calle del Futbol, a unos 100 metros de donde fue incendiado el Tsuru, para protestar por el supuesto maltrato que reciben los reclusos, los cuales -aseguraron- son sometidos a extorsiones y violaciones a sus derechos humanos.
Mientras tanto, Almonte Borja y Ramón Navarrete Magdaleno, coordinador regional en Acapulco de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), platicaron con internos, quienes plantearon nueve demandas, entre ellas el traslado de 33 internos a otro penal, que el Ejército Mexicano tome el control del Cereso de Acapulco y mayor seguridad, además de no proporcionar nombres de heridos, muertos y amotinados.
Autoridades aseguraron que únicamente fue encontrada una pistola 38 súper y que la situación estaba controlada desde las 15:30 horas, aunque autoridades abandonaron el penal después de las 18:30 horas.
La Jornada en Internet
Wow llo vivo un poco mas abajo y si se escuchar fuertes los balasos
ResponderBorrary por que no dan los nombres de los heridos y demas, no hay mucha seguridad por ahi
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