El arzobispo de Acapulco, Felipe Aguirre Franco señaló que la manifestación en la Catedral Metropolitana de la ciudad de México, fue una acción reprobable desde todos los puntos de vista y fue descalificado incluso por los mismos partidos políticos.
En conferencia de prensa en este puerto, fue cuestionado por los medios sobre el conflicto con la Catedral del Distrito Federal respondiendo que es una ofensa a Dios, a los fieles y una ofensa al lugar sagrado.
"Nosotros, independientemente de lo que haya pasado, una acción como ésta, y me remito a las palabras de los mismos partidos que han reprobado esta forma de incursionar y de violar la sacralidad del monumento religioso primado más importante que tenemos en México, por su jerarquía, la histórica Catedral Metropolitana del zócalo de la ciudad de México", señaló.
De igual forma fijó su postura entorno al conflicto entre el gobierno y egresados de la Normal Isidro Burgos de Ayotzinapa y señaló, no estar ni a favor ni en contra de la represión ni el vandalismo y manifestó que la Iglesia busca el bien de todos.
Aseguró que las actitudes violentas son un mal no solamente para la sociedad que se siente destinataria de estas agresiones, si no que también para los mismos promotores del conflicto, "acuérdense que el que escupe para el cielo se le devuelva a la cara, no, nos ponemos a favor de nadie son a favor de todos por el bien de la sociedad para que esta este libre de conflictos, en paz, fraterna, solidaria y caminando juntos".
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Juan José Belmonte Torres
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