El hotel Crowne Plaza de Acapulco, Guerrero, quedó blindado desde la mañana del jueves por centenares de profesores, algunos armados con palos, para impedir el acceso a los miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG), que intentaron impedir la realización del congreso para relevar a la dirigencia de la sección 14 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), para el cual la dirigencia magisterial rentó habitaciones para mil 100 personas durante tres días, con alimentos incluidos.
El cerco en torno al hotel cubrió calles aledañas al lugar. Grupos de maestros altos y fornidos, uniformados con playeras color naranja y café con vivos blancos, impidieron la entrada a “extraños”, es decir, sospechosos de ser miembros de la CETEG, a periodistas y hasta a turistas que tenían reservaciones para este fin de semana en el Crowne Plaza.
El presidente del congreso, Moisés Jiménez Sánchez, enviado por la dirigente moral del SNTE, Elba Esther Gordillo, justificó la presencia de los guardias. “No son grupos de choque. Les quiero decir que en esta sección, la presidencia, todos somos democráticos. Lo que no se vale en política es ser inocentes. En política la inocencia no es un pecado menor, simplemente tenemos que resguardar el congreso. Seguramente en algunos congresos haya más interés que otros, este es el congreso de la sección 14, es Guerrero, y hay que resguardar a los compañeros”, dijo.
En los trabajos, efectuados a puerta cerrada, participaron casi mil delegados provenientes de las siete regiones de Guerrero, aunque fue visible que casi no se registraron profesores en las mesas de La Montaña Alta y Baja, donde la CETEG es mayoría. La posible presencia de opositores no alteró la realización del congreso, que inició a las nueve de la mañana y para mediodía ya tenía cubierto 50 por ciento de los puntos de la agenda.
Según el actual dirigente de la sección 14, José Natividad Calixto, en las primeras horas de la madrugada del viernes “habrá humo blanco” y se ungirá al nuevo líder de la sección 14. Los nombres que se barajaban con mayor insistencia para dirigir la sección, entre cerca de 50 aspirantes, eran los de Eusebio Núñez, de Chilpancingo; Anastasio de la Sancha, de Acapulco; Pablo Díaz Oropeza, de la región Centro; Leobardo Jiménez Reyes, de Acapulco; Hilario Reyes Estrada, de Costa Grande, y Mauro Oyorzabales, de la Costa-Montaña, considerado en corrillos locales como delfín de la profesora Gordillo.
Advierten sobre provocaciones
De su lado, José Luis Muñoz, miembro de la dirigencia colegiada de la sección 14, sostuvo que su gremio expresará en el congreso un “repudio total al charrazo elbista y al reconocimiento de una dirigencia ilegítima”. Aseguró, igualmente, que en Guerrero “no pasará ni será reconocido ningún dirigente elbista”.
Según Muñoz, “con la maestra Gordillo no vamos a pactar, porque ya sabemos que sólo busca destruir lo que no puede cooptar”. Aclaró que se pidió a los opositores a Gordillo “no caer en provocaciones, porque como democráticos, estamos convencidos que la caída de la cúpula elbista es inevitable, y tarde o temprano serán erradicados del sindicato”.
Blindan elbistas hotel sede del congreso magisterial en Guerrero - La Jornada