Hyundai aterriza en un 'Guerrero Industrial'

Hyundai tomó la decisión de instalarse en Guerrero para ensamblar los chasises de dos de sus modelos de camiones. Estas unidades serán vendidas en México y posteriormente exportadas a Centro y Sudamérica. El anuncio oficial  será realizado el 25 de este mes.
Los técnicos de la firma coreana ya están trabajando en su planta dentro del único parque industrial que existe en la entidad, lo que en sí mismo es toda una historia.

Otra historia más es el aparente reencuentro del  estado de Guerrero con la política económica de promoción, una actividad rectora que llegó a ponerse en duda y no por pocas personas.

Pero vamos por partes.

El asunto de la Hyundai tiene  una historia un tanto accidentada. Jorge Peña Soberanis, empresario Guerrerense, Secretario de Desarrollo Económico en la entidad durante la gestión de Zeferino Torreblanca viajó a Corea con el propósito de intentar conquistar las voluntades de la automotriz  y aceptara instalarse en  su estado.  

Hubo mucho interés pero también factores que no permitieron que se concretara la idea.

El parque industrial, para entonces, funcionaba como un Fideicomiso con algunos pendientes por  cumplir. Estuvo en esas condiciones, digamos sin todas las de la ley, casi 12 años.

Ya en  el nuevo gobierno en Guerrero JULIAN LOPEZ GALEANA, Director General del Fideicomiso Guerrero Industrial, tutor del parque,  empeñó inicialmente  sus esfuerzos en dos vertientes: Por instrucciones de su jefe inmediato, Enrique Castro Soto, SEDECO en Guerrero, inició las tareas de regularización del fideicomiso y en paralelo replanteó a la Hyundai la posibilidad de regresar a la idea de centrar sus esfuerzos de manufactura de Chasises en el Parque Industrial, el UNICO parque industrial en Guerrero.
Los esfuerzos fueron un éxito en las dos vertientes. Luego de varias visitas y reuniones de trabajo Hyundai aceptó  establecerse  y en su planta ensamblará  500 chasises al año. Para empezar.

Cuarenta  fuentes de empleo de nivel técnico  ya  se encuentran laborando  en la planta. Pero este es el principio. Es previsible que si las labores de la Hyundai en Guerrero son un éxito, crezcan.

Y ya no está en la mano del director del parque, ni del Sedeco sino en la voluntad presupuestal que pongan los diputados del estado.

Hyundai ocupa una planta de dos mil metros cuadrados con 8,000 metros más para patio de maniobras y las autoridades del Parque les han reservados 10 hectáreas más en el compromiso de que si la Hyundai decide ampliar sus labores, hacer más compleja su operación el estado de Guerrero les donaría el terreno necesario para hacer más sofisticada su operación en el parque industrial.

El parque cuenta con más de 100 hectáreas ya equipadas porque en su accidentada historia este no solo fue el único parque industrial en Guerrero, sino también un parque sin infraestructura básica, entre ella el agua y la luz.

Tan solo decirle que llegó a tener un adeudo de predial de 28 millones de pesos.

Para ello se realizaron gestiones con Héctor Astudillo, en su momento Alcalde en el municipio de Chilpancingo quien facilitó las cosas de la regularización. Pero no había ni agua, ni calles, ni luz.


Julián López Galeana, acudió al Fondo Pyme para conseguir un  apoyo, primer tramo, de 15 millones de pesos con los que se pudo iniciar la introducción de agua, calles e iluminación. Otro tramo del Fondo Pyme, en terrenos similares, otros 15 millones, completará las labores de equipamiento básico, aunque ya se agotó el recurso de poner los predios del parque como aportación del estado.

Ahora tocará al Congreso del estado y a quienes, como Diputados y Senadores Federales,  son aliados de esta iniciativa.

Lo que vale oro hoy es que finalmente existe un Parque Industrial que con la llegada de Hyundai ya tiene tercera empresa en cuatro plantas o naves dentro del parque. Y la sola llegada de  la automotriz ha más que multiplicado  los compromisos de  presencias y representaciones en este territorio industrial.

Para 2013, inicios, ya estarán trabajando once empresas en “Guerrero Industrial”. Una empresa multinacional, la Hyundai,  y el resto guerrereses.

Se planea también  contar con  una estación gasolinera, tienda de conveniencia y un complejo pequeño para el descanso de los viajeros.

El parque está  a 30 minutos de Acapulco y a 15 de la cabecera municipal

Hecha su parte en el complicado proceso de regularización, el abogado Julián López Galeana tiene como reto, marcado por ENRIQUE CASTRO SOTO, Sedeco de la entidad, el conseguir que el Congreso Local decida apoyar el inicio de la maduración de este punto de promoción económica.

No basta el parque industrial, hay que ocuparlo.

Se contempla tener una Universidad Tecnológica Superior muy cerca de Guerrero Industrial y dependiendo de la manera en que se vayan articulando las cosas, sería probable que haga sentido para  el estado promover otro parque exclusivamente con vocación agroindustrial siguiendo las recomendaciones de un estudio de la Universidad de Loyola.

La mano está del lado del Congreso Local y de lo que puedan hacer por su parte los aliados de esta idea, Víctor Jorrín, Ricardo Mejía, diputados federales y Sofío Ramírez Senador quienes han comprometido su capital político en el reto.

Un tema referente en el Congreso estatal, quien tendrá que decidir si pone sobre la mesa los 100 millones de pesos que permiten promover profesionalmente a   este parque.

Lo que permite pensar que ANGEL AGUIRRE RIVERO reencuentra política económica en su entidad. Pero esa es otra historia que ya no cabe para contarla ahora.

Hoy lo que está en juego es el futuro económico de Guerrero. Ya no depende de su Sedeco, ni del Director de este parque o del Delegado Bernardo Limón. Depende de la  voluntad del legislativo estatal; ya le tocará demostrar de qué tamaño es su voluntad presupuestal para este terreno de promoción económica

Hyundai aterriza en un 'Guerrero Industrial'