Los damnificados de Ciudad Renacimiento reclamaron que no les avisaran de la apertura de las compuertas de la presa La Venta, pues señalaron que eso fue lo que causó la inundación.
Indicaron que la construcción de los puentes La Sabana 1 y La Sabana 2 impidieron que el agua escurriera como habitualmente lo hacía, y por esa razón el agua se estancó y subió de nivel.
De acuerdo con uno de los vecinos, Jesús Vinalay, son unas siete cuadras de Ciudad Renacimiento las afectadas por el desbordamiento del río.
Sobre las paredes de las casas se observa la línea que dejó el nivel del agua de más de un metro de altura.
Una de las quejas de los habitantes es que las autoridades no van a las zonas afectadas y convocan a los vecinos en gimnasio de la colonia, a donde llegan personas que no fueron afectadas, "y eso impide que la ayuda sea para quien realmente la necesita".
Se quejaron de que el martes las pipas del Ayuntamiento se vendieron hasta en 300 pesos, cuando ahora necesitan el agua para lavar sus casas.
Las historias de los vecinos son similares y se enteraron de que el nivel del agua iba en aumento por otros colonos o porque sintieron la espalda mojada cuando el agua llegó al colchón donde dormían, como le sucedió a Agustina Lorenzo Contreras.
Por su parte, María Luisa Álvarez señaló que la causa de la inundación fue que abrieron las compuertas de la presa La Venta y no les avisaron, pues la lluvia que cayó el lunes no fue tan fuerte.
En las calles Río Marquelia, Río Las Garzas, Río Velero, Paseo de la Sabana y María de la O se observó a los vecinos lavando sus calles y arrastrando el lodo.
Lo vecinos pidieron un camión para recoger el lodo, los muebles, sillones, colchones, lavadoras y la ropa acumulada en las calles.
Una vecina se quejó de que la lluvia se llevó hasta la comida y el martes, mientras buscaba tortillas, encontró que de una tienda tiraron costales de arroz y frijol a la basura y de ahí los levantó para tener que comer y les regaló a sus vecinas.
En las casas se observó que las familias empezaron a cocinar con leña porque las estufas se les dañaron, además de los refrigeradores y automóviles y motocicletas que estaban estacionados.
Una de las colonas se quejó de que una líder que trabaja con el diputado local Carlos Granda repartió huevos pero lo hizo sólo con las personas que la apoyan y no fue para todos los afectados.
También se quejaron de que de parte del Ayuntamiento les llevaron una botella de agua cuando lo que necesitaban era colchonetas para poder dormir porque perdieron todo.
Ayer por la mañana, el senador del PRD con licencia, Lázaro Mazón Alonso, y la secretaria de Medios, Imagen y Propaganda del Comité Ejecutivo Estatal (CEE) del PRD, Rosario Herrera Ascencio, recorrieron las calles afectadas.
En su recorrido ofrecieron gestiones para que desde el gobierno se ayude a los damnificados, y dijeron que en el Congreso el diputado local Sebastián de la Rosa Peláez presentaría un punto de acuerdo.
Explicaron que su presencia en el lugar era para conocer la situación y así poder ayudarles con lo que necesitaran.
Rosario Herrera les explicó que acudieron a expresarles su solidaridad y no como botín político, y les pidió a los vecinos que se organicen con un censo de afectados para que puedan solicitar ayuda.
Los vecinos les pidieron colchones, colchonetas y ropa porque el agua dañó todas sus pertenencias y esas eran las que más necesitaban porque no tenían donde dormir, y contaron que durmieron sentados en sillas o en cartones y que no tenían sabanas para arroparse.
Otra zona que sufrió afectaciones fue la carretera federal México-Acapulco, la cual se partió en un tramo por lo que las autoridades tuvieron que abrir una vía alterna de terracería para el paso vehicular.
La ayuda de Julieta Fernández
Justo donde los trabajadores del Ayuntamiento realizaban labores de limpieza llegó Julieta Fernández, esposa del virtual candidato del PRI a la gubernatura, Manuel Añorve, a regalar colchones en camionetas que en los costados tenían la propaganda de ese partido y en las que se leía: Manuel Añorve tu guerrero.
De acuerdo con los testimonios de las personas que aguardaban en espera de un colchón, Julieta Fernández les dijo que se repartirían en cada uno de los sectores afectados por desbordamiento del río.
También un testigo señaló que el asesor de Presidencia, Gabriel Olguín, pidió al coordinador de Servicios Públicos Municipales, Oscar Hernández, que llevara despensas a Ciudad Renacimiento para que las repartiera la esposa de Manuel Añorve, las cuales estaban en una camioneta Nissan con placas HA21933 a la que le quitaron unas calcomanías que la identificaban como un vehículo oficial.
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Juan José Belmonte Torres
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