El mejor amigo del hombre, el peor amigo de las tortugas

-          Detectan manadas de hasta 300 perros en playas de anidación de tortugas

-          Un perro puede destruir hasta mil 500 huevos en un día

 

El mejor amigo del hombre ha sido convertido por éste, en otro enemigo de las tortugas marinas pues en las playas de anidación, un can puede destruir cada día hasta 15 nidos o un equivalente a mil 500 huevos de la especie golfina, informó la organización ambiental Costasalvaje A.C.

     Natalia Parra del Ángel, Coordinadora de la Región Pacífico Sur de COSTASALVAjE, aseguró que entre las especies afectadas están las tortugas laúd, negra y carey, todas consideradas en distintos grados de peligro de extinción, las cuales arriban al Pacífico mexicano donde son víctimas de manadas de hasta 300 canes ferales.
     En 2009, Costasalvaje  realizó recorridos por diversas playas de arribo de tortugas marinas en los estados de Oaxaca, Michoacán y Guerrero, donde autoridades ambientales y responsables de campamentos tortugueros explicaron la grave problemática que representa la presencia de perros ferales en playas de anidación de las tortugas marinas.
     Parra del Angel señaló que los denunciantes coinciden en que la forma más humana para el control de las poblaciones de perros en zonas costeras, en pro de la preservación de las tortugas marinas y poblaciones humanas, radican en la implementación jornadas de esterilización canina, con el involucramiento de los lugareños en campañas de concientización ambiental.
       Explicó que Manuel Rodríguez Gómez, director del Centro Mexicano de la Tortuga CMT con sede en Mazunte, Oaxaca, informó a COSTASALVAjE que las poblaciones de hasta 300 perros depredadores de tortugas marinas y sus nidos. Y aunque se han realizado campañas de esterilización canina en las comunidades aledañas, no todos los canes son llevados a esas cirugías por sus dueños.
       Las playas oaxaqueñas de arribazón masiva de tortugas golfinas como La Escobilla y Morro Ayuta, así como Barra de la Cruz y Cahuitán, a las que llegan las tortugas laúd, padecen la presencia de manadas de perros que han identificado esas zonas como áreas de abundante alimento, acechando a las tortugas anidadoras y destruyendo gran parte de sus nidos.
        De acuerdo al Ecólogo Marino, Robeto Lugardo del campamento tortuguero Los Mogotes, ubicado en Pie de la Cuesta, Municipio de Coyuca de Benítez, Guerrero, aseguró que ha llegado a contabilizar que un solo perro llega a aniquilar hasta mil 500 huevos depositados por las tortugas marinas en un promedio de 15 nidos de la especie golfina.
        Juan Carlos Rosas, un joven de 18 años, sin contar con las respectivas autorizaciones oficiales mantiene desde hace ocho años un corral de incubación donde ha logrado que nazcan miles de tortuguitas marinas.

      El joven señaló que en 5 kilómetros de la playa Troncones, Municipio de La Unión en Guerrero las tortugas anidadoras no solo enfrentan saqueadores humanos y depredadores naturales como zopilotes, cangrejos y roedores, sino ahora hasta unos 30 perros ferales que atacan tortugas y destruyen sus nidos.
       En tanto, Enrique Rodríguez Krebs, Médico Veterinario y representante de la Fundación Helen Krebs de Protección a los Animales con sede en el puerto de Zihuatanejo, Guerrero y quien realiza desde hace varios años, la labor social de esterilizaciones de mascotas a bajo costo, indicó que con estas campañas para el control de poblaciones caninas en zonas de arribo de tortugas marinas provocaría un impacto positivo al Medio Ambiente y a las mismas comunidades humanas costeras.

 

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Juan José Belmonte Torres