Reciben hospitales con policías heridos amenazas de ataques

-          Dicen en velorio que Rogaciano Alba pudo estar detrás del ataque en Guerrero

Luego del ataque en la Costa Grande de Guerrero que dejó cuatro mujeres y dos policías muertos, los hospitales de Zihuatanejo y Tecpan donde se internó a los policías heridos recibió una amenaza de bomba, mientras que en el velorio, custodiado por el Ejército, circularon versiones en el sentido de que detrás del ataque estuvo el exlíder ganadero Rogaciano Alba.

      La noche de ayer se recibió una llamada anónima en el hospital integral de Petatlán en donde se informaba que lanzarían artefactos explosivos para asesinar a los policías heridos, por lo cual éste y alumnos de una escuela primaria y secundaria aledaña fueron desalojados.

     También se cerraron las calles cercanas al nosocomio para impedir el acceso a cualquier vehículo, tomando la policía estatal control de la zona. Sin embargo por la gravedad de sus heridas, tres policías fueron llevados al hospital de Zihuatanejo.

      En aquel nosocomio se recibió una llamada informando que un grupo armado se dirigía hacia allá para acribillar a los policías por lo cual  el hospital también fue desalojado cerca de una hora. En ambos nosocomios se mantiene vigilancia policiaca aunque trascendió que cinco de seis policías estatales heridos ya habían sido dados de alta y dos elementos federales continuaban internados.

     Durante el velorio de las cuatro mujeres asesinadas ayer en el poblado de San Luis La Loma, circularon versiones en el sentido de que el ataque perpetrado ayer fue organizado por el exlíder ganadero Rogaciano Alba.

     Lo anterior, en venganza al doble ataque registrado el 2 y 3 de mayo en donde fallecieron siete ganaderos, dos de sus hijos, siete empleados y además de que su hija fue "levantada" por  los sicarios sin que hasta el momento se conozca su paradero.

     Fuentes que se encontraban en el velorio señalaron que incluso en el comando armado viajaba también Ricardo Zambada "El rey", hermano de Ismael "El Mayo" Zambada. Ambos coordinaron al grupo que se trasladó en ocho camionetas de lujo y acabó con la vida de cuatro mujeres.

    El velorio se llevó a cabo en el lugar de la masacre, en donde cerca de 30 personas fuertemente armadas, vestidas con pantalones camuflajeados, camisas y capuchas negras entraron violentamente y asesinaron a Judith Ávila Ureña de 33 años; Yamilet y Odalys Lizbeth Granados Ávila de 12 y 8 años, y a Sonia Ávila Ureña de 21 años, que se encontraban dormidas en sus cuartos. Rubén Granados no fue ejecutado debido que no se encontraba en el lugar de los hechos.

     De acuerdo a versiones del procurador del estado Eduardo Murueta Urrutia, Rubén Granados tiene vínculos con la delincuencia organizada vinculada al tráfico de drogas, y lo mismo se ha difundido ampliamente de Rogaciano Alba.
      Hasta la noche de ayer a la entrada del poblado San Luis la Loma se encontraba un retén del Ejército Mexicano supervisando la entrada y salida de vehículos al poblado.

 

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Juan José Belmonte Torres