Elementos de la Armada de México y de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) con el apoyo de algunos pescadores, lograron regresar a mar abierto a una ballena jorobada de diez metros de longitud que estaba a punto de varar en las playas de Zihuatanejo.
El delegado en Guerrero de la Secretaría del Medio Ambiente y recursos Naturales (Semarnat), Miguel Ángel Calzada Adame, informó que el avistamiento de la ballena jorobada de la especie “megaptera novaeangliae” se realizó a las 11:30 de la mañana del pasado viernes.
De acuerdo al reporte, el mamífero marino, flotaba cerca de las playas de El Palmar y se encontraba lastimado, así como enfermo. En el lugar fue atendido por Jorge Guzmán y Maricela Bárbara, médicos veterinarios zootecnistas, miembros de la Red de Varamientos a nivel nacional.
El ejemplar tenía algunas lesiones superficiales en el dorso y flotaba ligeramente cargado sobre el lado derecho, sin realizar ninguna inmersión en el tiempo que estuvo ahí.
De acuerdo a los especialistas, el “desembalse” de la ballena pudo ser causado por algún problema respiratorio crónico. Al revisarlo, se notó una herida profunda en el pendúnculo con cicatrización parcial, lo que indicaba que la herdia causada por alguna red había sido hecha varios días atrás.
Calzada Adame informó que con ayuda de algunas embarcaciones se trató de guiar al ejemplar a altamar sin obtener respuesta positiva “ya que se notaba bastante deprimido”, sin embargo al insistir y llevarlo hasta una milla mar adentro, logró sumergirse y ya no regresó a la bahía.
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