"Expresamos que no echábamos la campanas al vuelo, hoy más bien las campanas tocan a duelo, porque la sociedad es derrotada y ofendida, cada vez que se agrede o se golpea con cualquier crimen que va directamente contra la dignidad humana o contra el derecho más sagrado de la persona que es su propia vida", señaló el arzobispo acapulqueño.
El prelado católico dijo que la Iglesia condena los hechos sangrientos que se registraron en este fin de semana largo en el estado de Guerrero, "pido a la ciudadanía que siga orando y pidiendo por esta violencia, e indicó que la iglesia no excomulga a quienes se partan del mandato de Dios y los invito nuevamente a la reconciliación", señaló.
"Nos causa gran consternación el recrudecimiento de los crímenes de la delincuencia común y organizada; vuelven otra vez a la población guerrerense de Acapulco y otros lugares con la dolorosa suma hasta de 41 muertos en este momento, están enlutando a tantos hogares y sembrando entre nosotros el temor y la zozobra, la inseguridad y la desconfianza, esta siembra que afecta más ciertos sectores y ciertos momentos y ciertas circunstancias, que debemos de advertir", dijo Aguirre Franco.
Ante esto hizo un llamado a promover y respetar la vida y que con la palabra de Dios y la oración exhortó a la ciudadanía a que vuelvan a Dios con una sociedad que fomenta los valores del aprecio, la dignidad intrafamiliar que se esta padeciend , para que las instituciones como las escuelas sigan fomentando estos valores del respeto, de la solidaridad y del perdón a los demás, que dejemos a un lado lo que sea discordia, enemistades, pleitos y divisiones.
Llamó a los medios de comunicación para que no magnifiquen la maldad, "los llamamos a todos, incluyendo a los malechores de estos enfrentamientos que han provocado más de 40 muertos en este sábado y domingo, para pedirles que nos acerquemos
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Juan José Belmonte Torres
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