Felipe Aguirre Franco, lamentó la "guerra a muerte y una lucha
declarada sin cuartel y sin respeto a la vida" que se da entre bandas
de narcotraficantes en el país.
Aguirre Franco aseguró que el asesinato de 24 personas en La
Marquesa y otros 11 en Mérida, Yucatán, son señales "de venganza, odio
y de rencor de ser lo peor de la maldad diabólica de los mismos
carteles de la droga".
El arzobispo acapulqueño exhortó a los narcotraficantes y a las
bandas para que vuelvan al camino de Dios que siempre está dispuesto a
perdonarlos, ya que no pueden estar dando "rayos y centellas,
sanciones a diestra y siniestra a todos los que están trabajando en
esta cultura de la muerte, de secuestros, asaltos, el narcotráfico y
las venganzas".
Calificó como "verdaderamente macabras" las muertes que se han
registrado en el país a causa del narcotráfico, que dijo es motivado
por las narcotienditas que distribuyen droga al menudeo en el país.
"No es el camino para ganar el dinero fácil, el dinero no es
fácil… aquello que es fácil es ilícito, cuando alguien nos quiere
hacer ricos de la noche a la mañana nos quiere estafar y pervertir,
llamamos a los que están en el camino del narcotráfico y de las bandas
a que se conviertan y que vuelvan a Dios; Dios siempre esta dispuesto
a perdonarlos", señaló el jerarca de la Iglesia Católica en el puerto.
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Juan José Belmonte Torres
